¿Qué es la cocaína?

La cocaína es una sustancia altamente adictiva que actúa como un potente estimulante, aumentando la atención, la energía y la sensación de claridad mental. Aunque es ilegal en muchos países, como Estados Unidos y España, sigue siendo ampliamente conocida por sus efectos. Entre los nombres más comunes para referirse a esta droga se encuentran:

  • Coca
  • Nieve
  • Perica
  • Falopa
  • Crack

La cocaína se presenta principalmente en dos formas: un polvo blanco fino y un cristal sólido. Ambas variantes derivan de las hojas de la planta de coca (Erythroxylum coca), que crece predominantemente en regiones del norte y oeste de Sudamérica. Durante siglos, las comunidades locales han masticado estas hojas para mantenerse alerta y reducir el apetito. Sin embargo, el desarrollo moderno ha transformado esta planta en una droga altamente peligrosa y adictiva.

Hojas de coca y polvo blanco

¿Cómo se produce la cocaína?

La elaboración de la cocaína implica un proceso químico complejo en el que las hojas de coca se transforman en un polvo blanco que contiene el principio activo. Este proceso fue descubierto por primera vez en 1860 por el químico alemán Albert Neiman. A principios del siglo XX, la cocaína era un ingrediente común en productos farmacéuticos y se utilizaba como anestésico local hasta que su alta peligrosidad y toxicidad limitaron su uso médico.

Actualmente, la producción a nivel industrial está prohibida y la cocaína se fabrica en laboratorios clandestinos, principalmente en Colombia, Perú y Bolivia. Según el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA), Colombia concentra aproximadamente el 90 % de la producción que llega a Estados Unidos y Europa. Además, para aumentar los beneficios, los traficantes suelen «cortar» la cocaína con sustancias como anfetaminas, azúcar o incluso productos peligrosos como anestésicos, paracetamol e incluso opioides sintéticos como el fentanilo.

¿Qué es el crack?

El crack, también conocido como cocaína en piedra, es una forma sólida de esta droga que se caracteriza por su alta pureza. Su nombre proviene del sonido que produce al calentarse. Para fabricarlo, el polvo de cocaína se mezcla con bicarbonato de sodio y agua destilada, creando pequeños fragmentos llamados «piedras». A diferencia de la cocaína en polvo, el crack tiene una acción más rápida y más intensa.

El crack generalmente se fuma utilizando pipas de vidrio, y esta vía de consumo aumenta significativamente su capacidad adictiva y sus peligros. Entre sus efectos físicos más graves se encuentran problemas respiratorios intensos, como bronquitis y neumonía, así como un mayor riesgo de parálisis respiratoria mortal.

¿Qué es la cocaína de base libre?

La cocaína de base libre es otra forma sólida de esta droga, similar al crack, pero en su producción se utiliza amoníaco en lugar de bicarbonato de sodio. Este método permite liberar la base de la cocaína de su forma natural, permitiendo que pueda fumarse. Aunque la base libre y el crack son frecuentemente confundidos, existen diferencias en su composición química y modo de fabricación.

Ambas formas de cocaína sólida tienen efectos altamente adictivos y presentan daños significativos en la salud del consumidor, tanto a nivel físico como psicológico.

¿Cómo usan las personas la cocaína?

La forma más común de consumir cocaína es inhalándola por la nariz, donde es absorbida por las membranas nasales para entrar al torrente sanguíneo. Esto produce efectos rápidos y una sensación inicial de euforia. Otras formas de consumo incluyen frotarla en las encías, disolverla en agua para inyectarla o fumarla en forma de crack o base libre.

  • Inhalación: Efectos rápidos pero de corta duración.
  • Inyección: Impacto intenso e inmediato, pero con un riesgo elevado de infecciones.
  • Fumar: Método preferido para el crack, es el que produce un «subidón» casi instantáneo.

Una práctica extremadamente peligrosa es mezclar cocaína con otras drogas, como heroína, para crear un «speedball». Esta combinación aumenta significativamente los riesgos de sobredosis y muerte.

¿Qué efectos tiene la cocaína en el cuerpo?

El consumo de cocaína produce una estimulación intensa del sistema nervioso central al bloquear la recaptación de dopamina, serotonina y norepinefrina. Esto genera una sensación de euforia, aumento de confianza y energía; pero estos efectos iniciales desaparecen rápidamente, dejando al consumidor en un estado de fatiga e irritabilidad.

Efectos a corto plazo

Entre los efectos inmediatos se incluyen:

  • Aumento del ritmo cardíaco y de la presión arterial.
  • Insomnio, reducción del apetito y dilatación de las pupilas.
  • Ansiedad, paranoia y conductas impulsivas.
  • Sensaciones de euforia e hiperactividad.

El agotamiento y los cambios de humor abruptos son comunes una vez que pasan los efectos iniciales.

Efectos a largo plazo

El consumo sostenido de cocaína puede causar:

  • Deterioro cognitivo y trastornos psiquiátricos, incluidos cuadros paranoides y psicosis.
  • Daños cardiovasculares graves, como infartos y arritmias.
  • Lesiones en el sistema respiratorio y perforación del tabique nasal.
  • Enfermedades hepáticas, renales y daño neurológico.

Además, en mujeres embarazadas puede generar abortos, partos prematuros o daños permanentes al feto.

Efectos de la cocaína en el cuerpo humano

¿Qué tan común es el uso de cocaína?

A nivel global, el consumo de cocaína ha incrementado en distintas poblaciones. En España, su uso recreativo ha crecido significativamente en sectores jóvenes y adultos. Una encuesta realizada en 2021 en Estados Unidos indicó que 1.7 % de la población admitió haberla consumido en el último año, siendo los jóvenes de 18 a 25 años el grupo con mayor prevalencia.

Aunque sigue siendo menos común que otras sustancias como el alcohol o los opioides, el abuso de cocaína representa un problema crítico en muchas comunidades, con un impacto significativo en la salud pública.

Legalidad de la cocaína

En España y en la mayoría de los países, la cocaína está clasificada como una sustancia ilegal debido a su alto riesgo de adicción y daño. Sin embargo, en contextos médicos muy limitados, se puede usar como anestésico local, principalmente en procedimientos en la región facial, como en ojos y garganta. Esta excepción no reduce su peligrosidad ni su potencial adictivo.

En contextos legales, numerosos países contemplan penas severas para la producción, distribución y consumo de cocaína. Además, las pruebas de detección pueden identificar su presencia en el organismo durante varios días tras el consumo.

Efectos del síndrome de abstinencia

El abandono del consumo de cocaína puede dar lugar a fuertes síntomas de abstinencia. El síndrome se divide en tres fases:

  • Fase 1 – Crash: Se caracteriza por ansiedad intensa, depresión, insomnio y antojos extremos durante las primeras horas o días.
  • Fase 2 – Abstinencia: Anhedonia, fatiga y ansiedad persistente, que pueden durar semanas.
  • Fase 3 – Extinción: Deseos intermitentes asociados a estímulos externos pueden surgir incluso meses después.

El acompañamiento médico y terapéutico es crucial para superar esta etapa con éxito.

¿Cómo ayudar a alguien que consume cocaína?

El apoyo a personas con adicción a la cocaína requiere una intervención integral que incluya diagnóstico profesional, tratamientos personalizados y la educación de su entorno familiar. Equipos especializados, como los de rehabilitación en centros como CAT Barcelona o Instituto Hipócrates, ofrecen terapias efectivas basadas en la evidencia.

  • Diagnóstico profesional: El primer paso para cualquier tratamiento exitoso.
  • Terapia personalizada: Adaptación a las necesidades específicas físicas y psicológicas del paciente.
  • Apoyo familiar: Herramientas a familias para fomentar la recuperación y evitar recaídas.

El acceso a tratamiento es fundamental para interrumpir el ciclo de consumo y restaurar la salud y el bienestar.

Artículos Relacionados: